Cuando hacemos referencia a intervenciones paisajísticas, no solo se trata de la especie a implantar, su altura, si posee algún atributo estético, o la combinación de colores que podemos hacer, sino que estamos hablando de modificaciones que hacemos en un determinado entorno.  Por este motivo, toda intervención debe ser realizada luego de un estudio exhaustivo del medio natural y social, para que el efecto sea positivo y no cause impactos negativos de diferentes magnitudes.

Teniendo en cuenta que los espacios verdes se consideran como “el lugar o sistema de lugares donde predomina el elemento vegetal por sobre el artificial y cuyo objetivo es cumplir un rol contenedor de actividades humanas al aire libre, siendo soporte del ocio y la recreación, así como del encuentro de los habitantes urbanos”; además de ser públicos y accesibles, deben ser seguros para los usuarios.

Desde la Comisión de Manejo, Regulación e Intervención de Paisaje del Colegio de Ingenieros Agrónomos de la Provincia de Córdoba, como especialistas en la temática, nos vemos en la obligación de monitorear la manera en que se realizan las intervenciones en el entorno provincial, sobre todo si consideramos que el impacto parece ser negativo.

Tal es el caso del recientemente inaugurado Parque de Chateau, donde se realizó un ‘Diagnóstico Rápido’ de manera ocular (llevado a cabo por profesionales Ingenieros Agrónomos matriculados, miembros de la Comisión) y se tomaron fotografías de algunos de los ejemplares, con el objeto de analizar el estado del arbolado.

Los resultados del ‘Diagnóstico Rápido’ fueron:

  • Arboles decrépitos.
  • Árboles secos en pie.
  • Árboles cuya copa viva no supera el 25%.
  • Árboles con ángulos de inclinación muy riesgosos.
  • Árboles con sistemas radiculares muy afectados.

Todas éstas son causales de riesgo para la seguridad de visitantes y trabajadores (más aun teniendo en cuenta la gran afluencia de personas que ha tenido el sector).

Originalmente, el parque conformaba un bosque denso (en su mayoría de siempre verdes). Al realizarse la obra de remodelación se extrajeron y podaron árboles que se resguardaban entre sí, quedando ejemplares solitarios, con sus sistemas radiculares afectados por las obras (canaletas, veredas etc.) y expuestos a vientos y tormentas, incrementando la vulnerabilidad de los remanentes a desgarros y caída de ramas y troncos.

A continuación, se presentan fotografías tomadas durante la inspección.

En las Figuras 1 y 2 se puede apreciar ejemplares de Cupressus spp. en uno de los ingresos al parque, con un bajísimo porcentaje de copa viva. Cabe destacar que esta especie no tiene capacidad de rebrote ni de recuperación de ramas.

Además, en la base se estableció un cantero con sistema de riego localizado, afectando el estado del sistema radicular debido a un exceso de agua que no ocurría en las condiciones anteriores. Se los considera peligrosos por su ubicación en el ingreso, en zona de estancia del parque. Debajo de las copas se han instalado bancos y zona de circulación.

Fig. 1. Cupressus spp. en uno de los ingresos al parque

Fig. 2. Cupressus spp.

En la Figura 3 se puede observar un grupo de árboles ubicados a la vera de un canal de desagüe. El trazado del mismo se realizó sobre área del sistema radicular, por lo que fueron sometidos a cortes y desgarros en esa zona. Esto genera un alto riesgo para la estabilidad y salud de los árboles que han sufrido un estrés importante por el impacto de la obra.

Fig. 3. Grupo de árboles en el margen del canal de desagüe

En la Figura 4 se observa un grupo de árboles afectados también por la realización de un canal de desagüe, ya que para ello se cortaron raíces que hacen al sostén de los ejemplares (Ver detalle en la Figura 5).

Además, en la Figura 4 se aprecia el grado de inclinación de los árboles y la gran cantidad de ramas secas que poseen, tanto aquellos que se encuentran en el borde del canal como los que se encuentran en el interior del parque.

Fig. 4. Grupo de árboles en el margen del canal de desagüe

Fig. 5. Detalle del corte de raíces

En la Figura 6 tenemos un ejemplar de gran tamaño, con evidencia de una poda reciente de ramas de diámetro considerable. Sin embargo, en la parte alta de la copa hay ramas secas. Esto lo convierte en un árbol con un nivel de riesgo alto para la seguridad, teniendo en cuenta que se ubica en la zona de juegos para niños.

Fig. 6. Árbol decrépito en zona de juegos para niños

En la Figura 7 se observan Cupressus (en uno de los ingresos al parque) con una inclinación considerable y con la presencia ramas secas, a pesar de haber sido intervenidos con poda.

En las Figuras 8 y 9 se pueden apreciar detalles de la copa de uno de los ejemplares donde hay una rama desgarrada, colgando.

Fig. 7. Cuppressus spp. en mal estado

Fig. 8. Cupressus spp. Detalle de copa

Fig. 9. Cupressus spp. Detalle de rama desgarrada y enganchada en la copa

En la Figura 10 se presentan dos árboles con una cazuela en un estacionamiento destinado a motocicletas. Los ejemplares tienen ramas secas y evidencia de cortes de raíces, efecto de la realización de la cazuela.

Fig. 10. Árboles en estacionamiento de motocicletas

En base a las observaciones realizadas, se recomienda llevar a cabo las diferentes prácticas de manejo a fin de garantizar la seguridad de los visitantes y trabajadores del mencionado espacio verde público.

Asimismo, es necesario que las obras de este tipo, como toda obra pública, sea comunicada a los colegios profesionales con incumbencias en el entramado de actividades que allí se generan.

 

Diagnóstico realizado por:
Ing. Agr. Esp.  Ana Ruth Meehan  (MP: 1388)
Ing. Agr. Esp. Alicia Bobone (MP: 2971)

Coordinadora de la Comisión de Manejo, Regulación e Intervención del Paisaje:
Ing Agr. Natalia Contin (MP: 4229)

*Nota elaborada por la Comisión de Manejo, Regulación e Intervención del Paisaje del Colegio de Ingenieros Agrónomos de la Provincia de Córdoba.